17196

Id:17196

Cosme
Vásquez de Arce y Ceballos, Gregorio
Fecha: 1657-1710
Download

4.65308
-74.091797
4.65308
-74.091797

Cosme
Vásquez de Arce y Ceballos, Gregorio
1657-1710
(1638-1711) Pintor del siglo XVII, nace en Bogotá y estudia en el colegio jesuita ‘San Bartolomé’ y luego en el ‘Gaspar Núñez’ con los dominicanos. Inició sus lecciones de pintura en el taller de los Figueroa hasta 1658. Su primera obra firmada data de 1657 y tuvo una producción muy activa de temáticas religiosas, las cuales se encuentran en museos e iglesias en Colombia, hasta 1710, cuando enloqueció. En 1701 fue apresado y gran parte de sus obras, 42 encargadas para la Capilla del Sagrario de Bogotá, las termina en la cárcel. Cuando sale se encuentra en gran miseria, enloquece y en 1711 muere. FUENTE: Arte Colonial: Catalogo de artistas coloniales.
No
01 Óleo sobre tela
PIZANO, Roberto. Fernando Restrepo. Gregorio Vásquez de Arce y Cevallos. Bogotá: editorial Siglo dieciséis, 1986

Iglesia San Ignacio
Colombia
Bogotá
Colombia
Bogotá
Local

Santos
Santos Masculinos
Mártires hombres
Cosme y Damián
N/A

98

Paisaje
Santo
Túnica
Instrumentos médicos
Terrestre / paisaje
Retrato secular y religioso
Sin donante
Ninguna
Tradición de la Iglesia
Aureola
Palma del martirio
Recipiente
Sombrero
Edad: adulto
Escena: simple
Género masculino
Personaje individual
Personajes: Sagrados


La cultura barroca es gestual. El gesto complementaba la comunicación visual con gestos de oralidad, de modo que las pinturas “hablaban”. La siguiente información trata de reconstruir la cultura gestual quirológica y quironómica a partir de los tratados y de las frecuencias gestuales en la pintura colonial.

29 qn1 06 3871 copia 29 QN1 06 Admiratur - Admiración
2587 anonimo hombre sanchez navarro s.xviii mx copia 00 Objetos en las manos
0862 anonimo sor ana mar%c3%83%c2%ada de san francisco y neve xviii mx copia 01 Posición: de Pie
N/A
N/A
N/A
Cosme y Damián
0303-01-01
N/A
N/A
No

San Cosme y San Damián fueron hermanos, naturales de Egea. Estudiaron letras y ciencias humanas y especialmente medicina, no pocas veces por arte divina sanaban dolencias incurables. Cuaraban por misericordia y amor a Dios. Lisias, perseguidor de Cristianos, mandólos traer a su presencia, y procuró persuadirles que sacrificaran a los dioses del imperio (romano); y como vieron que perdía tiempo, los mandó atar de pies y manos, azotarlos, atormentarlos, y luego, así como estaban atados, que los echasen en la mar; pero un ángelo los desató y libró y puso en la ribera. Súpolo el procónsul, y atribuyéndolo a arte mágica, los mandó poner en la cárcel, y al día siguiente los hizo echar en una hoguera encendida; y los dos santos salieron ilesosde las devoradoras llamas. Sin embargo, Lisias, mandólos colgar en el ecúleo; y descoyuntar sus sagrados miembros; más el ángel del Señor, que los había librado ya del agua y del fuego, los amparó también entonces, y los sacó de aquél tormento sin lesión alguna. Lisias, negándose a creer lo sucedido los mandó atar en sendas cruces, los levantasen en alto y que allí fuesen apedreados hasta que acabasen la vida, todo lo cual no tuvo más efecto que los tormentos pasados. Finalmente los mandó asaetear hasta destrozar los cuerpos; y al ver la inutilidad de este tormento, los hizo degollar. De esta manera acabaron sus vidas los dos santos mártires, y con ellos otros tres hermanos suyos.