16057

Id:16057

Esteban
01 Anónimo,
Fecha: S.F.
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4.65308
-74.003906
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Esteban
01 Anónimo,
Autoría desconocida.
No
Óleo sobre madera
VALLÍN, Rodolfo. María Victoria Galves. Taller de Restauración de San Agustín. Arte y Fe: Colección artística agustina. Bogotá: Provincia de Nuestra Señora de la Gracia, 1995.

Colección Órden Agustina
Colombia
Bogotá
Colombia
Bogotá
Local

Santos
Santos Masculinos
Mártires hombres
Esteban
N/A

Cuadro que pertenece posiblemente a un portón o a un relicario. A diferencia del de Elías Patriarca, este no tiene tan marcado el “horror vacui” en la representación, haciendo que sea visualmente más claro. Sus ornamentos son los de un alto dignatario de una orden monacal. Una de sus manos profundiza en la zona central del pecho como gesto de pasión y en la otra, porta la palma del martirio. Su rostro se encuentra iluminado desde atrás por un halo de luz que puede ser reflejo de una luz al lado derecho del cuadro. La proporción entre manos, cuerpo y rostro no es coherente y no aparecen sus pies. Su mirada es perdida (no tiene un punto fijo) y el fondo es tenebrista, pero se alcanza a reconocer en él un paisaje. El rostro denota en el personaje una edad entre los 35 y 40 años.
María Cristina Pérez

Paisaje
Santo
Cartela
Arco
Terrestre / paisaje
Retrato secular y religioso
Sin donante
Inscripción
Tradición de la Iglesia
Alba
Palma del martirio
Edad: adulto
Escena: simple
Género masculino
Personaje individual
Personajes: Sagrados


La cultura barroca es gestual. El gesto complementaba la comunicación visual con gestos de oralidad, de modo que las pinturas “hablaban”. La siguiente información trata de reconstruir la cultura gestual quirológica y quironómica a partir de los tratados y de las frecuencias gestuales en la pintura colonial.

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0862 anonimo sor ana mar%c3%83%c2%ada de san francisco y neve xviii mx copia 01 Posición: de Pie
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Esteban
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No

La historia de san Esteban procede de los Hechos de los Apóstoles. Según este texto, con motivo de la institución de los “siete hombres de buena reputación, llenos de Espíritu y de sabiduría” a los que se encarga el “servicio de las mesas”, Esteban es elegido para formar parte de este selecto grupo. Acusado de haber proferido palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios, es llevado ante el Sanedrín. Exasperados al oírle afirmar que “contempla a los cielos abiertos y al Hijo del hombre en pie a la diestra de Dios”, sus acusadores lo sacan de la ciudad y comienzan a lapidarlo. Los testigos de la acusación, precisa el texto, habían depositado sus vestiduras a los pies de un joven llamado Saulo, que “era uno de los aprobaba este asesinato”. Una Vida fabulosa de san Esteban protomártir, del siglo X, relata cómo habría sido arrebatado el día de su nacimiento por Satanás, y recogido por un obispo, Julián.